Con la crisis del Coronavirus y más gente que nunca pasando mucho tiempo en casa y en las redes, el uso de Facebook e Instagram ha aumentado tanto que ha habido algunos picos de conexiones tan grandes que han llegado a provocar problemas en el servicio normal de sus aplicaciones.
En cualquier otro contexto que no fuera el de la crisis, más usuarios habría significado más ventas y el encarecimiento paulatino de anuncios. Lo que ocurre por el contrario es que hay más usuarios, pero estos convierten menos.
Las empresas, en general, están gastando menos en publicidad y esto ha provocado que los costes de anuncios sigan una tendencia bajista. El coste de 1000 visualizaciones ha bajado entre 15-25% en el último mes.
La gran pregunta ¿cómo aprovechar esta situación a nuestro favor ahora que hacer anuncios cuesta cada vez menos?
En un artículo anterior mencionábamos que para las empresas que se lo...
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